No pensé que este blog de fotografía y vídeo de boda se convertiría en una vía de autoexpresión, un lugar mágico dónde documentar nuestras vivencias y mostrarlas a novias, novios, invitados e incluso otros profesionales del sector de la fotografía de boda.
Tampoco pensé que sería el punto de ignición de una preciosa carrera junto a mi compañero Chema Vela y que ambos contaríamos un montón de historias, logrando emocionar a tantas y tantas parejas de recién casados, que han depositado su confianza en nuestro estudio de fotografía para algo tan personal como su boda.
Este blog destapa muchas pequeñas ideas que tenemos enfrascadas y nos ayuda a darlas a conocer. Mediante el relato de nuestras particular visión ayudamos a nuevas parejas a afrontar el día su boda de forma exitosa, independientemente de si se decantan finalmente por nuestro estudio fotográfico o no.
Hoy me siento tremendamente feliz, tengo la suerte de contar la historia de Elena y Alberto. Ellos han sido nuestra primera pareja de 2014 y quiero dedicarles este post.
Alberto y Elena decidieron marcar la fecha de su boda el 15 de febrero de 2014. Estaba todo preparado y perfectamente orquestado por la pareja: El traje del novio, el vestido de la novia, restaurante, peluquería, ubicaciones para hacer el reportaje fotográfico, etc. Pero claro, la lluvia es uno de esos elementos que no se pueden controlar. Por mucho que te empeñes y le pongas velas a todos los santos, si dan lluvias, ten por cuenta que lloverá. Aún así, se puede sacar partido a un contratiempo tan tedioso como la lluvia y el reportaje de tu boda puede ser igual de espectacular que un día soleado. (Como se suele decir: «Al mal tiempo buena cara»)
La escasez de luz después de la ceremonia y la lluvia, amenazaban con deslucir el reportaje de boda de Elena y Alberto, pero afortunadamente no fue así.
No queremos que nada estropee el día de tu boda, ni las condiciones climatológicas ni otros elementos ajenos a la cermonia. Nos gustan los retos y aportar soluciones que ayuden a mejorar el resultado final del reportaje. Por eso siempre tenemos un plan B y si hace falta un C y E.
La boda se celebraría por la tarde, y esto suponía una dificultad añadida, pues entendíamos que una vez salieran los novios de la iglesia tendríamos muy poca luz natural para realizar las fotografías, por lo que debíamos escoger un lugar cercano de camino al restaurante.
Elena y Alberto escucharon atentamente nuestras propuestas sobre el lugar dónde realizaríamos la sesión fotográfica después de la ceremonia y enseguida comprendieron la situación a la que nos enfrentábamos para realizar las fotografías de su boda, pues gran parte de ellas serían nocturnas.
Las ubicaciones fueron fáciles de elegir, la ceremonia se ofició en Noblejas un pueblo de la provincia ( Toledo ) a escasos kilómetros Aranjuez, que es sin duda uno de los mejores escenarios para un reportaje de boda en el ámbito nacional y del que alguna vez ya hemos hablado.
Nuestro trabajo se desarrolló con la normalidad a la que estamos acostumbrados dentro del estrés que se genera el día de la boda, sobre todo las horas previas al evento . Desde primera hora de la mañana pude conversar con el padre de la novia, que me contaba lo fantástica persona que es Elena, como era de pequeña o el arraigo que tiene a su pueblo y sus fantásticas tradiciones.
Alberto es genial, de esas personas que hacen que tu trabajo sea escandalosamente fácil. Accedió encantado a hablar delante de nuestras cámaras de sus vivencias con Elena, o de su pedida de mano en Venecia.
Tengo que reconocer que editando estas partes del vídeo me emociono, ellos comparten su historia contigo y lo hacen desde la humildad, y la sinceridad, y tras horas de edición de vídeo escuchando esos relatos, al final acabas cogiendo cariño a las parejas.
Después de la ceremonia conseguimos nuestro objetivo. Unas fantásticas fotografías de boda nocturnas en los aledaños del Palacio Real De Aranjuez. No obstante, quiero agradecer a Elena su estoico esfuerzo por aguantar el frío. Creo que lo peor para ella fue soportar la humedad que se acumuló en los bajos de su vestido durante la sesión fotográfica.
La ceremonia se celebró en Las Fuentes, unos salones que ya conocemos muy bien y que como siempre no defraudaron con su excelente servicio. Recomendamos encarecidamente cualquiera de las fincas del grupo Bodas Reales en Aranjuez, son realmente excepcionales.
Estamos muy contentos con el acabado de los álbumes de boda, y el nuevo formato de nuestra cajitas para los vídeos. Como broche final no podían faltar nuestras pequeñas fotografías de boda en formato Polaroid. Un detalle que incluimos en nuestro paquete foto y vídeo sin coste adicional y que las parejas suelen utilizar para decorar algún rinconcito de la casa.
Chema y un servidor solo tenemos palabras de agradecimiento para Elena y Alberto. Gracias por dejarnos contar vuestra historia, gracias por ceder vuestras imágenes para este post, gracias por vuestra confianza. Os deseamos lo mejor de lo mejor en vuestra nueva etapa.
Un abrazo.
Equipo Plasmalia